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Emma B. El diario de una chica de provincias

del duero

del duero

 

Gracias a the passenger por la foto.

5 comentarios

emma -

en eso estamos, en eso estamos, querido, en mantenernos lejos de los caras cortadas.
Y hoy de regalo unos besos almendrados.

Toisaras -

Eso será por no haber visto: Marcelino Pan y Vino, Bambi, Qué Bello es Vivir, Polliana, Miguitas y el Carbonero, etc, et, etc.
No me regale besos sin tormenta, que son unos besos con altas presiones, comparados con aquellos dados a refugio de una borrasca anunciada por el barco K.
La ternura es tan obligatoria, como los buenos modales; tiene que huir (supongo lo hace) de aquellos que sean inmunes a la lágrima y a la corrección.
Gracias por lo besos atmosféricos.

emma -

discrepo, encanto. mis estudios científicos me dicen que hay quienes no heredan semejante tierno-gen.
besitos sin tormenta.

Inma -

Es una foto preciosa. Gracias

Toisaras -

Parece como si su alma tuviera kilométrico. Siempre ocurre que nos parece mejor la otra orilla, no es cierto; si se cruza un puente, vemos desde el otro lado la orilla por la que andamos, mas ó menos bonita, pero no tan diferente. Las hacemos nosotros distintas, buscamos encontrar en la otra orilla lo que no vemos en esta, vamos a buscar en nosotros y dejar a la Renfe tranquila, hacen su trabajo, llevar y traer sueños e ilusiones algún contratiempo también viaja. La ternura aún en el fondo de la bolsa, entre la ropa sucia y los envoltorios de los bocadillos, siempre va con nosotros, lo mismo que el rencor y la envidia. Estos dos últimos si sabemos que los llevamos - pesan mas- la ternura no pesa, es liviana, pero siempre, siempre, va con nosotros.