Como si alguno de los dioses allá arriba se hubiese despertado de un mal sueño dispuesto a amargarnos la semana, hubiese balbuceado entre dientes: “Ya está bien de otoño modosito y soleado”, sin pensarlo dos veces abrió la espita del bóreas helador. Y todos en la ciudad con las chaquetas y brazos cruzados, cara de susto y ojos de haber tenido un mal sueño.
2 comentarios
emma -
bailarinas, los únicos zapatos de la temporada.
Toisaras -
¿Pero es que ya no se venden zapatos?
¿Ande dejan los caballos? ¿Y las espadas?
!Hale venga, todas con botas y pantalón remetido!
¿Dónde los Geox? ¿Dónde los Hush Puppies? ¿Dónde los Castellanos de borlitas?