de motorizados y peatones

Pasas parte de tus días con las manos al volante practicando el despiste en el mundo peatonal: pasar a toda leche por los pasos de cebra y que se paren ellos, apuras hasta el último centímetro y le pasas rozando al caminante que viene cruzando, o los ves un poco despistados en la acera ¡zas palante!, y en una de éstas de tanto estirar casi te llevas por delante a más de uno que tiene que pararse en seco, acabas frenando gastando neumático y te paras al borde del bolso o del bastón del asustado viandante.

Otra gran parte de tus días transcurren como peatón, y ahí ya cambia la cosa. Paseas más chulo que un ocho por tus pasos de cebra, miras de lejos a los que se acercan con gesto de "anda, atrévete y no pares, ya verás...", cuando los autos frenan a tus pies chirriando te aplicas media sonrisa de complacencia, y si alguno te pasa rozando le enseñas en bolso, le sacudes el paraguas o le increpas con algo como: ¿qué? listo para matar...

Tal vez misombra ha conseguido escaparse del congelador en una de estas idas-venidas alzheimicas que padezco —voy a la cocina o al baño a buscar algo, llego y me he olvidado, esto me pasa varias veces al día, así que vuelta atrás al punto de partida y si hay suerte recupero el hilo y recuerdo—. Pues eso, en uno de estos paseíllos abrí la puerta del congelador, se ha escapado y ahora me tiene presa en este vivir bicéfalo.

7 comentarios

[emma - 25 de febrero de 2010 - 17:00]

hombre, por dios, como no voy al conocer el mejicano de la esquina, con su terraza bajo los plátanos y sus ricas comiditas. Probaré la michelada... -acabo de anotar semejante nombre- a su salud, y larga vida a mi esclavo favorito!

[Toisaras - 24 de febrero de 2010 - 19:12]

Si, hombre, sí.
- MICHELADA
- COCHINITA PIBIL

[Toisaras - 24 de febrero de 2010 - 19:08]

No, querida, no he bebido.
¿conoce el mejicano de la esquina de Van Dick?
¿ha probado la michelada, con un taco de cochinita pibil?
¿a que espera para hacerlo?
Ya me falta un día menos para la muerte. Ese día lo haré, pensando en sus ojos sus labios y su escote.
Después que me incineren. Pero Ud. no llore, jamás se llora la muerte de un esclavo, si acaso una lagrimita, un suspiro. Pero nada más.

[emma - 23 de febrero de 2010 - 23:15]

el azar siempre a vueltas..., querida zeltia.

Y la araña desde que Irina sacude el plumero con tanto brío la he perdido de vista, o tal vez... terminó su ciclo vital, ya sabe, estos rigores invernales liquidan cualquiera.

[emma - 23 de febrero de 2010 - 23:08]

aquí, en el solar patrio, peatón=especie protegida, está seguro, Toisa, querido? No sé si habra bebido... :-)

[Zeltia - 23 de febrero de 2010 - 13:52]

el enlace de misombra que has puesto me ha llevado al post en el que me detuve por primera vez en tu blog hace ya más de un año!
:-)
(¿como sigue la araña?)

yo como peatona soy mucho más agresiva que como conductora.
De pronto me asaltan todos los derechos que "los coches" me han quitado, y sí soy de las que si puedo apaleo el coche con el paraguas...
(como conductora soy bastante respetuosa con los peatones, no así con los otros conductores, ah no, a chulo (siempre pienso que hombre) chula y media)

[Toisaras - 23 de febrero de 2010 - 10:49]

El respeto a los otros, es cuestión de educación para la ciudadanía ó lo que es lo mismo urbanidad.
Tan sólo conozco un lugar en toda España en el que se respeta al peatón como si fuera especie protegida.